El Comité Olímpico Español ha seleccionado a la regatista Támara Echegoyen y al piragüista Marcus Cooper como abanderados de la delegación española en la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024.

Echegoyen, campeona olímpica de Elliott 6m en Londres 2012, obtuvo el cuarto lugar en la clase 49er FX en Río 2016 y Tokio 2020. En esta última edición, compitió por primera vez junto a Paula Barceló, quien también será su compañera en París 2024.

Por su parte, Marcus Cooper es doble medallista olímpico en piragüismo de esprint, disciplina que ha dado muchas alegrías al deporte español en recientes Juegos Olímpicos. El palista mallorquín fue campeón olímpico en K1 1000 m en Río 2016, y obtuvo la medalla de plata en Tokio 2020 como parte del K4 500 m junto a Saúl Craviotto, Carlos Arévalo y Rodrigo Germade.

¿Qué significa ser abanderado?

Ser abanderado en los Juegos Olímpicos siempre representa un sueño y una aspiración. En la época escolar, es una distinción que premia alguna virtud de los elegidos y, sin duda, genera orgullo. El abanderado se convierte en un modelo a seguir. En los Juegos Olímpicos, es un privilegio deseado por cualquier atleta, ya que reconoce sus virtudes y los coloca en el centro de atención.

A lo largo de la historia olímpica, España ha tenido numerosos atletas que han sido abanderados. Es importante destacar que la elección de los representantes varía según el país: actualmente se realizan encuestas telefónicas y por Internet, pero también hay países que delegan esta selección en el Comité Olímpico Internacional (COI) o siguen el mandato de las federaciones deportivas nacionales, después de consultarlas para tomar la decisión.

Una historia de grandes atletas

Volviendo al caso español, durante años persiste una controversia sobre la identidad del primer abanderado del país en los Juegos Olímpicos. Finalmente, una investigación del historiador Fernando Arrechea confirmó que José García Lorenzana, un atleta que alternaba entre el atletismo y el boxeo, fue el primer afortunado en los Juegos de Amberes de 1920.

Cuatro años más tarde, en los Juegos de París 1924, el portador de la bandera española en la ceremonia inaugural fue Félix Mendizábal, uno de los mejores velocistas españoles de la primera mitad del siglo XX, siete veces campeón de España en pruebas de 100 y 200 metros.

Diego Ordoñez, otro destacado velocista madrileño, fue el abanderado en los Juegos de Ámsterdam 1928, mientras que en Los Ángeles 1932 se rompió la tradición de nominar a representantes del atletismo al elegir a uno del tiro, el comandante de infantería Julio Castro del Rosario.

Al finalizar el período de entreguerras, el boxeador Fabián Vicente del Valle fue el abanderado español en Londres 1948. Este deportista salmantino, también químico, fue un pionero del judo en España.

En Helsinki 1952, donde debutaron la Unión Soviética e Israel en los Juegos, el abanderado español fue el remero Luis Omedes, un guipuzcoano polifacético que además fue tenista, jugador de hockey sobre hierba, jugador de polo, jinete y practicante de luge.

En 1956, España boicoteó los Juegos Olímpicos de Melbourne (Australia) en protesta por la invasión soviética a Hungría. El siguiente abanderado en una ceremonia de apertura fue el gimnasta artístico valenciano Jaime Belenguer, en Roma 1960.

Luego siguieron el jugador de hockey sobre hierba Eduardo Dualde (Tokio 1964), el regatista Gonzalo Fernández de Córdoba (México 1968), el esquiador Paquito Fernández Ochoa (Múnich 1972), el boxeador Enrique Rodríguez (Montreal 1976), el piragüista Herminio Menéndez (Moscú 1980) y otro regatista, Alejandro Abascal (Los Ángeles 1984).

En Seúl 1988, España presentó su primera mujer abanderada: la infanta Cristina de Borbón, quien junto con su hermano, el actual rey Felipe VI, ambos representantes de la vela, protagonizó una imagen icónica en Barcelona 1992.

Otro destacado atleta de las regatas fue el abanderado en Atlanta 1996: el canario Luis Doreste, competidor en vela en las clases 470, Flying Dutchman y Soling.

En el nuevo milenio, en Sídney 2000, el elegido fue el jugador de waterpolo Manel Estiarte. En Atenas 2004 le tocó ser la segunda mujer española abanderada en unos Juegos Olímpicos: la judoca Isabel Fernández.

El piragüista David Cal fue el abanderado en Pekín 2008, precediendo a dos grandes leyendas del deporte español: Pau Gasol en Londres 2012 y Rafael Nadal en Río de Janeiro 2016, quienes quizás sean los más célebres en haber tenido este honor.

En los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Saúl Craviotto, un piragüista de Lérida, y Mireia Belmonte, una nadadora de Badalona, fueron los abanderados españoles, marcando la primera ocasión en que hubo una doble representación del país. De cara a los Juegos Olímpicos de París, los elegidos para portar la bandera de España serán Marcus Cooper y Támara Echegoyen.

Todos los banderas de España en los JJOO

París 2024: Marcus Cooper y Támara Echegoyen

Tokio 2020: Saúl Craviotto y Mireia Belmonte

Río 2016: Rafael Nadal

Londres 2012: Pau Gasol

Pekín 2008: David Cal

Atenas 2004: Isabel Fernández

Sídney 2000: Manel Estiarte

Atlanta 1996: Luis Doreste

Barcelona 1992: Felipe de Borbón

Seúl 1988: Cristina de Borbón

Los Ángeles 1984: Alejandro Abascal

Moscú 1980: Herminio Menéndez

Montreal 1976: Enrique Rodríguez Cal

Múnich 1972: Francisco Fernández Ochoa

México 1968: Gonzalo Fernández de Córdoba

Tokio 1964: Eduardo Dualde

Roma 1960: Jaime Belenguer

Helsinki 1952: Luis Omedes

Londres 1948: Fabián Vicente del Valle

Los Ángeles 1932: Julio Castro del Rosario

Ámsterdam 1928: Diego Ordóñez

París 1924: Félix Mendizábal

Amberes 1920: José García Lorenzana